Insomnio cultural Madrid'10

La noche en blanco - Madrid 2010

La 5ª edición de La noche en blanco de Madrid tuvo lugar anoche. La organización es fundamental para una noche como esta, me explico:

Cerca de 190 actividades gratuitas con más de 300 artistas, colectivos, compañías... distribuidas en áreas de la cultura y las artes tales como: música, literatura, cine/vídeo/audiovisuales, arte y exposiciones y artes escénicas.

Mi Noche en blanco

Lo bonito de esta noche es que no es un evento único, cada uno puede componer su noche en blanco a placer (o casi) y seguramente la noche en blanco de unos no se parezca en nada a la de otros,  pero el objetivo es empaparse de cultura bajo la capa de las estrellas, que en Madrid son escasas. Fran, Pedro y un servidor nos decantamos por dedicar la primera parte de la noche al visionado de cortos en Colón. Entre los cortos, unos buenísimos otros... buenos, desfilaron algunos de Isabel Coixet, Alejandro Amenábar, Daniel Sánchez-Arévalo, y los de Javier Fesser y su factoría Pendelton, que a mí me gustan mucho. Las sillas eran incómodas y nos fuimos a cenar. En Colón había un twister gigante y un cono verde con una fotogenia desmesurada.

Abandonamos Colón y enfilamos la Puerta de Alcalá pero antes, a las puertas del Retiro un grupo de bailarines de los 60 o 50 deleitaban a los allí presentes. En Alcalá podías imaginarte un idílico hogar urbano (foto). Siguiendo nuestro camino llegamos a ver una "maravilla" de espejos en el techo incomprensible pero muy atractivo para el ciudadano medio. Cibeles proyectaba imágenes históricas en pantallas y música a raudales. El camino continuaba dirección Alcalá-Sevilla-Sol donde estaba el set de TVE. Calle Preciados arriba encontramos en Callao un divertido entretenimiento infantil de magia que acabó temprano. Una farola del revés y muchas ganas de encontrar un baño para recargar energías y cambiar líquidos. Cultura, curiosidades, exposiciones, imagen urbana alterada, las personas ocupaban el lugar de los coches y los coches no eran cultura. Una noche atípica. Una noche cultural. Una noche dedicada al arte y por el arte en general. El pueblo de Madrid respondió derramándose por las arterias de la capital agradeciendo este tipo de eventos. Madrid es cultura, sólo hay que saber encontrarla.